Síndrome braquicefálico

El síndrome braquicéfalico, consiste en una serie de anomalías anatómicas que pueden presentarse de forma aislada o en conjunto, y que son extremadamente frecuentes en los animales (perros y gatos) de razas braquicefálicas. Antes de pasar a hablar directamente del síndrome, quiero explicarte qué significa “braquicefálico”, a partir de sus respectivos orígenes griegos “braqui” significa “corto” y “cefálico” significa «relativo a la cabeza», por lo tanto en conjunto braquicefálico se entiende como “de cabeza corta”, característica hereditaria que comparten las razas afectadas por este síndrome. En la actualidad existen diversas razas que se clasifican dentro de este grupo, y todas ellas, han logrado estas características anatómicas tan particulares gracias a la reproducción de individuos seleccionados en base a su aspecto físico, génetica, comportamiento, etcétera, con la finalidad de mantener, y a veces acentuar estos “rasgos deseables” en la descendencia de estos animales, rasgos que muchas veces son indeseables desde el punto de vista médico.

«Las mascotas braquicefálicas, tienen rasgos que muchas veces son indeseables desde el punto de vista médico»

Mv. Pavez

Probablemente ya te encuentres familiarizado con varias de las razas en cuestión, ya que se encuentran dentro de las más populares, algunas de ellas son:

• Pug
• Bulldog inglés
• Bulldog francés
• Pekinés
• Boston terrier
• Norwich terrier
• Cavalier king charles spaniel
• Lhasa apso
• Shih tzu
• Boxer
• Shar pei

• Persa
• Himalayo
• Birmano
• Exótico de pelo corto

Algunas de las alteraciones anatómicas que pueden presentar los pacientes con síndrome braquicefálico son:

• Agujeros nasales estrechos (estenosis de narinas): producto de la malformación de los cartílagos nasales. Dificulta el ingreso del aire hacia la nariz al inspirar.

• Paladar blando elongado: el paladar blando es la parte más caudal (hacia la cola del animal) del paladar, y cuando se encuentra alargado, dependiendo de la severidad de la anormalidad, puede generar flujo turbulento del aire al pasar, aumentando el esfuerzo que se requiere para respirar, provocando inflamación y edema laríngeo, estrechando aúnmás la vía aérea. Las alteraciones a este nivel también pueden provocar problemas para deglutir (tragar), generando la aspiración accidental de agua, alimentos o vómito, lo que produce un grave cuadro clínico denominado neumonía por aspiración.
• Eversión de los sáculos laríngeos: los sáculos laríngeos son un par de cavidades que se encuentran justo por delante de las cuerdas vocales, y que debido a la presión negativa y el esfuerzo respiratorio que se genera en los animales con síndrome braquicefálico durante la inspiración, es que estas estructuras empiezan a ser succionadas progresivamente hacia dentro de la laringe, inflamándose y edematizándose de tal manera que finalmente adquieren la forma de un par de masas redondas y brillantes en la mitad inferior de la apertura laríngea, impidiendo la visualización de las cuerdas vocales, y obstruyendo en gran medida el paso del aire. La eversión de los sáculos laríngeos corresponde al primer estadio del colapso laríngeo (complicación grave del síndrome braquicefálico).

• Hipoplasia traqueal: es una alteración en la cual la tráquea tiene un diámetro inferior al normal, dificultando el paso del aire y por lo tanto aumentando el esfuerzo requerido para respirar.

Estas anomalías provocan alteraciones en tres sistemas corporales principalmente:

1.- Sistema respiratorio: dificultad respiratoria (distrés respiratorio), bajo nivel de oxígeno en la sangre (hipoxemia),  alto nivel de dióxido de carbono en la sangre (hipercapnia), aumento anormal de la temperatura corporal (hipertermia), neumonía por aspiración, acumulo de líquido en los pulmones (edema pulmonar), colapso laríngeo.

2.- Sistema cardiovascular: colapso cardiovascular en caso de producirse una obstrucción completa de vías aéreas o una hipertermia severa. Este colapso provoca que el flujo sanguíneo cerebral sea insuficiente como para mantener al paciente consciente.

3.- Sistema gastrointestinal: dificultad para ingerir alimento y agua, aerofagia (tragar aire), irritación del esófago (esofagitis), reflujo, regurgitación, vómitos, diarrea, gastritis, alteraciones en la movilidad del sistema digestivo. Empeoramiento de diversas enfermedades digestivas.

¿Qué síntomas podría presentar mi mascota?

Como podrás deducir son muy variados los síntomas que podrías notar, pero aquí te listo algunos de ellos:

• Ronquidos
• “Siempre” preferir dormir de espaldas (con el estómago hacia arriba)
• Respiración ruidosa
• Respiración acelerada
• Respiración dificultosa
• Jadeo frecuente
• Respirar con la boca abierta
• Movimiento de los cartílagos nasales al respirar
• Tos
• Arcadas
• Dificultad para comer y tragar
• Salivación
• Regurgitación y vómitos
• Intolerancia al ejercicio (no quiere jugar o bien se cansa fácil y demora mucho en recuperarse después de ejercitarse)
• Desmayo y colapso

Estos síntomas pueden empeorar en casos de sobrepeso, enfermedades hormonales, excitación, miedo, estrés de cualquier tipo, aumento en la humedad y/o temperatura ambiental. Debido a que los perros necesitan jadear (de forma eficiente y sin dificultad respiratoria) para poder regular su temperatura corporal, los pacientes con síndrome braquiocefálico están muy predispuestos a sufrir shock por calor (golpe de calor o shock térmico), el cual es una situación de descompensación general y de riesgo vital (urgencia médica).

En los últimos años hay países los cuales ya han tomado medidas legales respecto a la crianza de razas braquicefálicas de perros, por ejemplo en el 2019 Holanda prohibió la cría de cualquier perro braquicéfalo, mientras que durante el 2022 un tribunal de Oslo (Noruega) en un fallo histórico, prohibió la cría de las razas bulldog inglés y cavalier king charles spaniel, con base en su ley vigente de bienestar animal.

Si tienes un perro o gato braquicefálico te recomiendo que sea evaluado tempranamente durante su vida en busca de las alteraciones anatómicas propias de este síndrome, debido a que si no son lo suficientemente severas en un principio, podrían realizarse maniobras de tipo quirúrgico (excepto para la hipoplasia traqueal), para facilitar la respiración de tu mascota y evitar en lo posible la progresión del cuadro. Si tu animal de compañía es diagnosticado tardíamente, es decir cuando ya presenta complicaciones secundarias, y se han dañado de modo permanente los tejidos de los distintos sistemas afectados, es probable que requiera cirugías de urgencia, de alto riesgo, y de relativamente mal pronóstico en cuanto a la mejoría de su salud posterior y a largo plazo.